La oficina del gobernador Jeff Landry dijo en un comunicado que "existe el compromiso de garantizar que Nueva Orleans esté con el pie derecho cuando se encuentre en el centro de atención del mundo" al justificar la decisión.
Por el momento se ha desalojado al menos a 75 personas que vivían en carpas improvisadas cerca del Superdomo de la ciudad, donde actuará Swift.
La iniciativa no fue apreciada por Nate Fields, director de Estrategia y Servicios para Personas sin Hogar. "La diferencia entre él y ellos", dijo en una declaración al gobernador, "es que ellos no tienen un lugar donde vivir. Si tuvieran las cosas que él tiene, no estarían en la calle".
El próximo mes de febrero, Nueva Orleans volverá a estar en el punto de mira mundial, ya que acogerá el Super Bowl LIX, la final del campeonato de fútbol, el evento deportivo por excelencia en Estados Unidos.
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