Alberto Gilardino se convirtió hoy en el cuarto entrenador despedido en apenas 12 fechas disputadas del campeonato italiano, según confirmó el club Genoa, al anunciar que será reemplazado por el francés Patrick Vieira.
"Alberto Gilardino fue relevado de su cargo. El club le agradece por los objetivos alcanzados en estos años y le desea lo mejor para el futuro", indica el comunicado del Genoa que confirma el despido del campeón mundial con la "azzurra" en Alemania 2006.
El "Grifone" ascendió de su mano a la máxima categoría hace dos temporadas y realizó una buena campaña: terminó undécimo, mientras que el también ascendido Frosinone perdió la categoría ese mismo año y Cagliari, que había logrado la promoción en los "play-off", logró mantenerla con lo justo.
Pero la opaca temporada de Genoa en el actual torneo, en el que suma diez unidades (las mismas que Cagliari, su rival en la reanudación del certamen, el próximo domingo) y está un punto por encima del antepenúltimo Lecce, sentenciaron el fin del ciclo de Gilardino.
En las pasadas dos fechas, su equipo había logrado un triunfo vital como visitante de Parma (1-0) que le permitió salir de la "zona roja" de la tabla y cortar una racha de dos derrotas en fila, pero luego empató 1-1 con el también ascendido Como de local.
Genoa, cuya propiedad pasó a manos del grupo estadounidense A-CAP (compañía de seguros que reemplazó al fondo de inversiones 777 Partners), habría aceptado el consejo del área técnica del club al decidir este golpe de timón.
No habían dado señales en ese sentido durante el receso por la doble fecha FIFA, ni el director general, el español Andrés Blázquez, ni el director deportivo, Marco Ottolini, pero la salida de Gilardino al parecer se venía "cocinando" desde hacía algún tiempo.
El plantel del Genoa, sin embargo, se había encolumnado detrás de su ahora ex entrenador, respaldado también por los aficionados, que seguramente dirán lo suyo el domingo en el estadio Luigi Ferraris cuando el equipo salga al ruedo frente al Cagliari de Davide Nicola.
El arribo a Génova de Vieira, quien en la pasada temporada entrenó a Racing de Estrasburgo de su país tras haberlo durante dos años en Crystal Palace, es esperado para esta misma tarde o para el miércoles por la mañana.
Una vez que rubrique su contrato, realizará el primer entrenamiento con el plantel del Genoa, que se entrenó a las órdenes de Gilardino por última vez el sábado por la mañana y debía volver a hacerlo hoy.
Pero cuando arribó al centro deportivo de Pegli, el campeón mundial recibió la confirmación de su salida y abandonó el lugar con gesto adusto, solo y al volante de su propio vehículo, delante del cual partía el de su ayudante de campo Gaetano Caridi.
Su gesto, con un pulgar hacia arriba al saludar a los cronistas apostados en el lugar, no hacía presagiar este final.
Gilardino siguió los pasos de su colega Daniele De Rossi, despedido por la Roma el 18 de septiembre (tras la cuarta fecha) y reemplazado por el croata Ivan Juric, quien corrió su misma suerte después de la derrota de local con Bologna por 3-2 en la duodécima fecha.
En reemplazo de Juric asumió el veterano Claudio Ranieri, quien tomará las riendas del plantel "giallorosso" hasta el final de la actual temporada tras volver de su retiro luego de haber salvado al Cagliari del descenso en la anterior.
Después de esa duodécima fecha, previa al receso, también dejó su cargo Luca Gotti en Lecce, que igualó 1-1 en su estadio frente al Empoli, reemplazado por Marco Giampaolo.
Genoa espera por la llegada de Vieira, mientras que Cagliari decidió no perder tiempo y retomó los entrenamientos hoy de cara a un partido que resulta vital para ambos equipos en la lucha por la permanencia.
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