El ucraniano Oleksandr Usyk, quien el sábado defenderá las coronas de peso completo de la AMB, el CMB y la OMB, frente al británico Tyson Fury, en un combate que se celebrará en Riad y será la revancha del que sostuvieron el 18 de mayo en esta misma ciudad y consagró al primero por puntos en fallo dividido tras dejar sin invicto a su rival en 35 peleas como profesional.
El "Gato" y el "Rey de los Gitanos" se vieron las caras hoy en la conferencia de prensa de presentación del duelo durante poco más de 11 minutos, en la cual posaron para las cámaras y quedaron frente a frente a escasos centímetros el uno del otro en absoluto silencio, tras lo cual fueron separados cuando el clima comenzaba a calentarse en el ambiente.
A siete meses del primer combate que unificó los cuatro cinturones en la máxima categoría después de 25 años, Fury, de 36 años, con un récord de 34 victorias (24 por nocaut), un empate y esa única derrota, quiere tomarse revancha y promete: "Ya hemos hablado demasiado. Ahora vamos en serio porque el sábado pienso causar mucho dolor y daño aquí".
El invicto Usyk, de 37 años, con 22 triunfos en igual cantidad de combates, 14 de los cuales por la vía rápida, y quien antes del combate unificatorio renunció a su corona de la FIB, eludió responder a las provocaciones de su rival.
La novedad en esta revancha pasa por un hecho que promete revolucionar la historia del boxeo, pues sin bien el jurado que fallará en caso de que la pelea no se resuelva antes de los 12 asaltos pactados será de carne y hueso, será el primero supervisado por un juez de inteligencia artificial.
El Kingdom Arena de Riad será testigo de esta novedad, anunciada por el jeque Turki Al-Sheikh, asesor de Deportes de la Corte Real saudita con rango de ministro y presidente de la Autoridad General de Entretenimiento.
El proyecto cuenta con el patrocinio de la histórica revista "The Ring", fundada en 1922, cuyo paquete accionario mayoritario fue adquirido por el consorcio encabezado justamente por Al-Sheikh, según el cual el juez "artificial" juzgará lo que suceda en el cuadrilátero "sin prejuicios y con imparcialidad".
La opinión del mismo servirá sólo para la estadística, pues no tendrá influencia en las tarjetas en caso de que la pelea se resuelva por esa vía.
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