"Quiero felicitar a mis jugadores porque no era fácil este partido", resumió Simone Inzaghi tras la goleada por 3-0 que Inter logró en Cerdeña frente a Cagliari para escalar a la cima al menos hasta que Atalanta complete su duelo en el Olímpico frente a Lazio en el cierre de la jornada de adelantos del campeonato italiano.
"Cagliari es un equipo organizado y tenaz y más allá de las últimas derrotas que sufrió demostró que está vivo, por lo que hoy necesitábamos mostrar la mejor versión de Inter", explicó el entrenador "nerazzurro", al término del que calificó como "un lindo partido" y al advertir que "a partir de mañana nos enfocaremos en la Supercopa" de Italia.
Un torneo en el que Inter enfrentará el 2 de enero en Riad por el pasaje a la final justamente a Atalanta, con el que pelea cabeza a cabeza en el campeonato y en el marco de un torneo en el que también defiende la corona (Milan y Juventus chocarán un día después en la otra semifinal).
Inzaghi aplaudió también la vuelta al gol del argentino Lautaro Martínez, autor del segundo frente a Cagliari y quien llevaba ocho partidos sin festejos: "Claramente, no estaba feliz, pero lo veía tranquilo. Él es nuestro capitán, nuestra guía y un jugador importantísimo. Por suerte hoy se reencontró con el gol, pero siempre trabajó para el equipo".
De paso, recordó que Inter, "ganó diez de sus últimos 12 partidos en el campeonato y empató los dos restantes jugando bien al fútbol" y consideró que su mejor recuerdo del año que se cierra con otra victoria fue "ver la marea de fanáticos celebrando el 'scudetto', una imagen que jamás olvidaré".
Su colega Davide Nicola se refirió a la quinta derrota en fila de Cagliari, aunque consideró que la de hoy "no fue tan grave como la previa frente a Venezia (2-1, Ndr) porque enfrentamos a un rival muy fuerte, el que más me impresionó de todos, e hicimos lo posible", manteniéndolo a raya al menos en el primer tiempo, que finalizó igualado sin goles.
Nicola, un especialista en salvar equipos del descenso que intentará repetir con un Cagliari que marcha antepenúltimo y en la "zona roja" de la tabla, destacó que las derrotas previas fueron ante rivales como "Fiorentina, Atalanta y Juventus", equipos que pelean por objetivos bien distintos.
Respecto de los silbidos con los que los aficionados de Cagliari despidieron a su equipo, explicó que "no me generan fastidio porque representan el modo que eligieron para expresar su descontento y también su amor, aunque de una manera distinta" y consideró que el objetivo de mantener la categoría finalmente "se logrará".
"Ahora tenemos que enfocarnos en Monza", aseguró el aludir al próximo rival de Cagliari que marcha último en la tabla tras perder por 2-1 en campo de Parma con un gol sufrido en tiempo adicionado en el estreno del entrenador Salvatore Bocchetti como reemplazante del despedido Alessandro Nesta.
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