En el lado positivo, según los últimos resultados del Instituto de Estadísticas (Istat), el número de personas empleadas volvió a aumentar y el desempleo está en su nivel más bajo en los últimos 20 años. Pero el motor de la economía todavía le está costando arrancar y podría cerrar el año con apenas medio punto.
En octubre de 2024, tras la caída de septiembre, el número de ocupados comenzó a crecer nuevamente y, con 47 mil unidades más, llevó la cifra de personas con un empleo a 24.092.000.
Un incremento que, en consecuencia, también hace caer la tasa de desempleo hasta el 5,8% en el mismo mes, un nivel no visto desde abril de 2007. Y la tasa de desempleo entre los jóvenes también cae hasta el 17,7%.
"Recibimos con satisfacción los datos de octubre publicados por Istat con el empleo en alza y la tasa de desempleo en baja.
Datos que nos alientan a continuar nuestro trabajo con determinación para fortalecer el empleo, apoyar a las familias y empresas, y construir un futuro de crecimiento y estabilidad para Italia", comentó la primera ministra Giorgia Meloni.
Sin embargo, la evolución de la situación económica es menos brillante. En el tercer trimestre, de hecho, el PIB corregido por los efectos del calendario y desestacionalizado confirma un incremento nulo respecto al trimestre anterior, a pesar de un incremento del 0,4% respecto al mismo período de 2023.
Lo que conduce a este punto al crecimiento alcanzado para todo el año en el 0,5%.
Entre los agregados de la demanda interna, mientras la inversión fija bruta languidece, con una caída del 1,2%, el consumo final nacional parece volver a levantar cabeza, con un aumento del 1% (y el gasto del 1,4% de las familias residentes y de los ISP).
Y es precisamente la tendencia de estos últimos lo que, para algunos observadores, parece abrir vislumbres más favorables para los próximos meses.
"Las estimaciones provisionales sugieren que la prudencia en el consumo puede haberse relajado", comentó a este respecto el servicio de estudios de la confederación del comercio Confcommercio.
El informe subraya que "con los buenos datos sobre el empleo, esto constituye la condición previa para una parte final del año ligeramente mejor en cuanto a expectativas, con potencial repercusiones favorables en el legado que se transmitirá hasta 2025".
Y Confesercenti también se centra en el consumo, explicando cómo el buen comportamiento del turismo y las renovaciones de contratos contribuyeron sobre todo a su incremento.
En cuanto a la evolución del empleo en octubre, el instituto de estadística precisó que en general el aumento afecta a los asalariados permanentes y a los autónomos, mientras que disminuye el número de empleados de duración determinada: pasaron a ser más de 16.200.000 los primeros, 5.158.000 los segundos y la cifra de empleados con contrato a plazo fijo bajó a 2.724.000.
El crecimiento del empleo mensualmente afecta en particular a los hombres y a las personas de al menos 50 años de edad; entre los de 15 y 24 años y las mujeres, sin embargo, se mantiene estable, mientras que disminuye entre 25 y 49 años.
Además, el número de personas que buscan trabajo desciende un 3,8% (-58 mil unidades) para hombres y mujeres y para todos los grupos de edad. Y la tasa de ocupación mensual se eleva al 62,5%.
Hoy también se conoció, en línea con el reciente resurgimiento de la inflación, un aumento de los precios de producción de los servicios en el tercer trimestre: +1,6% trimestral y 4,4% tendencial. Y finalmente, algunas sombras más para la economía provienen del mundo empresarial, con el índice PMI manufacturero que registró 44,5 en noviembre desde 46,9 en octubre, cayendo a su nivel más bajo en un año.
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