La progresiva despoblación afecta a todo el territorio, pero con diferencias entre Norte, Centro y Sur, donde se producirá la caída más significativa. En el Sur, la población podría reducirse a 7,9 millones de habitantes en 2080, 3,4 millones desde la misma cifra en 2050.
En la transición que elevará la población actual de 59 millones de habitantes a 46 en 2080, estiman 21 millones de nacimientos, 44,4 millones de muertos, 18,2 millones de inmigrantes procedentes del extranjero y 8 millones de emigrantes.
Los flujos migratorios futuros -según el ISTAT- no van a contradecir el signo negativo de la dinámica natural. También aumentará el desequilibrio entre las viejas y las nuevas generaciones.
En 2050, los alcaldes de 65 años podrían representar el 34,5% del total (actualmente el 14%) y los alcaldes de 85 años podrían pasar del 3,8% al 7,2% en 2023, con algunas fluctuaciones significativas.
En este caso - explica - el impacto sobre las políticas de protección social será importante, teniendo como objetivo satisfacer las necesidades de una proporción de más de una persona.
La relación entre personas en edad de trabajar (15-64 años) y personas en edad no laboral (0-14 y más de 65 años) cambiará de tres a dos en 2023 a aproximadamente uno a uno en 2050.
En el Sur, tienen un proceso de envejecimiento más rápido, con una edad media de 51,5 años en 2050 frente a los 50,8 a nivel nacional.
Y las familias también cambiarán de piel. Dentro de 20 años habrá un millón de casos más, pero más fragmentados.
Las vacaciones serán aún más reducidas: el número medio de personas pasará de 2,25 personas en 2023 a 2,08 en 2043.
El aumento de la esperanza de vida y la inestabilidad matrimonial aumentarán el número de personas que viven solas, auténticas "microfamilias", en un 15% en total, pasando de 9,3 millones a 10,7 en 2043.
Asimismo, se espera una nueva disminución del número de personas. Hoy representan casi tres familias sobre 10 (29,8%) y en 2043 podrían representar menos de una cuarta parte del total (23,0%).
Y más de una de cada cinco familias no tendrá hijos. Un cambio estructural que augura un avance de estos últimos sobre los primeros en "un futuro inminente" que en algunas zonas del país podría materializarse en un área no demasiado amplia. En el Norte, por ejemplo, podría ocurrir a partir de 2040 (en el Nordeste, a partir de 2037), mientras que en el Centro la expansión se producirá en 2043.
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