Originario de Grizzo di Montereale (Pordenone), Chiaranda vivió entre 1909 y 1959 y sus huellas se perdieron durante la ascensión a uno de los picos más altos de Sudamérica, el Mercedario (6.770 metros), en el lado argentino y en el corazón de los Andes. Así lo informó el periódico friulano Messaggero Veneto.
Emigrante, restaurador, experto montañista y también documentalista, Chiaranda había filmado con su cámara numerosas hazañas llevadas a cabo en las montañas de Europa y de los Andes.
El cuerpo hibernando fue encontrado, casualmente, el 10 de enero de 2022, por una expedición de jóvenes exploradores chilenos, Horacio Ritter y Erick Pizarro, quienes partieron hacia el Mercedario precisamente para repetir su hazaña siguiendo la misma ruta.
El primer intento fracasó (el tercero habría tenido éxito) pero al regresar, perdidos, los montañistas chilenos se toparon con el cuerpo de Chiaranda con la mochila y el material que había portado en la ascención.
Los familiares de Grizzo di Montereale Valcellina (Pordenone) no fueron informados del descubrimiento hasta octubre de 2023 por los mismos exploradores chilenos, que los habían buscado durante mucho tiempo y que luego llegaron a Italia para encontrarlos y traerles los objetos de su familiar.
En Grizzo vive hoy el sobrino del alpinista, Luciano Chiaranda, y sus hijos. La historia se hizo pública hoy.
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