Poco después de que se dispersara la manifestación, que se celebró en un espacio "protegido", los nacionalistas protestaron marchando por la capital ucraniana y burlándose de los manifestantes.
Entre los asistentes a la marcha se encontraban varios soldados abiertamente homosexuales, incluido Petro Zherukha, de 28 años, que fue autorizado por su unidad a participar en el Orgullo.
Las encuestas muestran que los gays, lesbianas y transgénero son cada vez más aceptados en el país desde el inicio de la guerra y que los soldados abiertamente homosexuales no dudan en alistarse en las fuerzas armadas.
"Muchos de los manifestantes han pedido que se autoricen oficialmente las uniones civiles entre personas del mismo sexo en el país. La falta de un marco legal para parejas del mismo sexo significa que es posible que las parejas de soldados LGBTQ muertos o heridos no sean informadas de lo que les pasó a sus seres queridos".
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