Apoyados por un helicóptero y perros Saint-Hubert entrenados para buscar personas, los gendarmes inspeccionan desde hace cinco días la zona de la desaparición, cerca de la estación de esquí de Guzet, en Ariège.
Este hombre, médico jubilado que vive en el departamento de Lot y Garona, en el suroeste de Francia, estaba de vacaciones en los Pirineos. El martes, sobre las 16.00 horas, envió "un mensaje de texto de alerta a su familia, informando que se había caído y estaba herido", precisó la fiscalía de Foix.
Por tanto, se abrió una investigación sobre la desaparición.
El examen de los datos de geolocalización de su teléfono no permitió encontrarlo.
El hijo informó que el excursionista viajaba solo y acampaba. Su coche fue encontrado al día siguiente de la alarma, aparcado cerca de Col d'Escots, no lejos de Guzet.
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