La luz verde a la operación, tal como se anunció días atrás, proporciona condiciones para proteger la competencia en el aeropuerto de Milán-Linate, en las rutas de corto recorrido entre Italia y Europa Central, y en las conexiones de larga distancia entre Fiumicino y América del Norte con apertura a empresas rivales.
El gigante alemán del transporte aéreo adquirirá una participación del 41% en ITA a su accionista el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) mediante una ampliación de capital de 325 millones de euros, para luego ascender en una segunda fase -en 2033- al 100% de la nueva empresa nacida de las cenizas de Alitalia, para una inversión total de 829 millones.
"Hemos evaluado con mucha atención" la operación Ita-Lufthansa, afirmó la vicepresidenta de la Comisión Europea, Margrethe Vestager. Y apuntó que "era necesario evitar que los pasajeros acaben pagando más o se encuentren con menos servicios de transporte aéreo y de peor calidad en determinadas rutas dentro y fuera de Italia".
"El paquete de soluciones propuesto por Lufthansa y el MEF aborda plenamente nuestras preocupaciones en materia de competencia, garantizando que se mantenga un nivel suficiente de presión competitiva en todas las rutas relevantes", amplió Vestager.
"Hoy cerramos un asunto histórico y de larga data, el de la aerolínea nacional y luego el de ITA", afirmó el Ministro de Economía de Italia, Giancarlo Giorgetti. "Es un éxito para este gobierno, un éxito italiano, europeo y alemán, incluso comparado con una negociación muy dura", añadió.
"La solución positiva viene con un operador como Lufthansa que nos reconforta y nos permite desarrollar el tráfico aéreo hacia y desde Italia, desarrollar la economía italiana, Roma se convertirá en el centro de referencia para América y Africa", subrayó el ministro.
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